Un neurocirujano se ocupa del diagnóstico y tratamiento de pacientes con trastornos del cerebro, la médula espinal y la columna vertebral y los nervios periféricos en todas las partes del cuerpo.
Síntomas típicos como parálisis parcial o completa, debilidad muscular, pérdida total o parcial de la sensibilidad, convulsiones, dificultad para leer y escribir, habilidades cognitivas deficientes, dolor inexplicable y disminución del estado de alerta.
Las pruebas incluyen el análisis de sangre, análisis de orina, pruebas de imagen como una radiografía o resonancia magnética, prueba de líquido cefalorraquídeo (LCR), biopsia, electroencefalografía (EEG) y electromiografía (EMG).
Tanto los neurólogos como los neurocirujanos tratan a personas que tienen afecciones que afectan el sistema nervioso. Sin embargo, los neurocirujanos operan quirúrgicamente, mientras que los neurólogos no.
Sí, tratan muchas enfermedades y afecciones diferentes que afectan el cerebro, la columna vertebral, la médula espinal y los nervios periféricos.